domingo, 25 de octubre de 2009
Cartuja de Aniago, Valladolid
Detalle de la cabecera de la iglesia
Localización: Villanueva de Duero, Valladolid
Cómo llegar: Salida 160 de la A-6. Se coge la CL-610 dirección a Valladolid unos 20 Km. Antes de llegar a Villanueva de Duero, se toma un pequeño camino de tierra en el que indica "Aniago". La cartuja está a un par de kilómetros.
Titularidad: Privada.
Datación: Siglos XV-XVIII
Estado de conservación: Ruina que amenaza hundimiento.
Interés: El lugar es devastador, duro, poético. Interesante para fotógrafos.
Estado actual del templo
La Cartuja de Aniago fue el único cenobio de esta orden en tierras de Valladolid. Tiene un gran valor histórico, no sólo por esta circunstancia, sino porque conserva algunas peculiaridades dignas de mención, como el lavatorio semiderruido -eso parece, al menos- que a duras penas subsiste en el centro del claustro, más propio de Francia o Cataluña que de Castilla. Su finalidad era la ablución antes de los ritos litúrgicos.
Lavatorio, derruido
Vista general del conjunto
El claustro está alzado en piedra y ladrillo, conjunción muy característica de Valladolid. Es de enormes proporciones, con bóvedas de crucería. Se ha dicho que Aniago es irrecuperable, pero no es del todo cierto. Aunque las pandas yacen derruidas, el conjunto es perfectamente consolidable como ruina, como espacio abierto y expositivo muy propicio para actividades culturales al aire libre. Las estancias cenobíticas se conservan a duras penas, pero resisten. El estado general es pésimo, pero si hubiera voluntad de recuperación -eso sí, con una considerable inversión- podría rehabilitarse casi en su totalidad.
La espadaña desde el claustro
En lo que se refiere a su origen, aunque hay constancia de que los Jerónimos se asentaron en las inmediaciones de esta construcción en el siglo XII, todo lo que conserva data de los siglos XV a XVIII. La iglesia y la sacristía tienen una decoración barroca muy destacable, prácticamente perdida, de los siglos XVII y XVIII, muy expoliada y deteriorada.
Detalle del claustro
La Iglesia, de medianas dimensiones, es muy hermosa. Presenta dos accesos, uno protogótico y el otro muy posterior. La cabecera, poligonal, amenaza ruina inmediata, por la abertura de los paramentos, muy descarnados. La bóveda se ha perdido para siempre.
Detalle de la decoración, prácticamente perdida
Todo el conjunto logra transmitir un intenso sentimiento de melancolía, ideal para los aficionados a la fotografía. En la actualidad, la Cartuja de Aniago es una explotación agrícola, un parque de maquinaria y un almacén de fertilizantes.